Preparar las patatas:
Pela las patatas y córtalas en trozos o gajos al gusto.
Lávalas bajo agua fría para eliminar el exceso de almidón,
luego sécalas bien con un paño limpio o papel absorbente.
Primera fritura:
Calienta el aceite de oliva a 140 °C y fríe las patatas suavemente
hasta que estén blandas pero sin dorarse.
Retíralas y escúrrelas sobre papel absorbente.
Segunda fritura:
Aumenta la temperatura del aceite a 180 °C y vuelve a freír las patatas
hasta que queden doradas y crujientes.
Escúrrelas de nuevo para eliminar el exceso de aceite.
Montar el plato:
Sirve las patatas en un plato amplio y reparte por encima el bacon frito
y el queso cheddar para que se funda ligeramente con el calor.
Servir:
Acompaña con salsa Ranchera para dar ese toque final irresistible.
Preparar las patatas:
Pela las patatas y córtalas en trozos o gajos al gusto.
Lávalas bajo agua fría para eliminar el exceso de almidón,
luego sécalas bien con un paño limpio o papel absorbente.
Primera fritura:
Calienta el aceite de oliva a 140 °C y fríe las patatas suavemente
hasta que estén blandas pero sin dorarse.
Retíralas y escúrrelas sobre papel absorbente.
Segunda fritura:
Aumenta la temperatura del aceite a 180 °C y vuelve a freír las patatas
hasta que queden doradas y crujientes.
Escúrrelas de nuevo para eliminar el exceso de aceite.
Montar el plato:
Sirve las patatas en un plato amplio y reparte por encima el bacon frito
y el queso cheddar para que se funda ligeramente con el calor.
Servir:
Acompaña con salsa Ranchera para dar ese toque final irresistible.